La casa de
Fernando Carreras constituye uno de los primeros palacetes residenciales
modernos de Vigo. En su época fue tal su prestigio que muchos ciudadanos
recorrían largos paseos para contemplarlo y admirarlo.
Su arquitecto
fue Manuel de Úceda, quien después de varios proyectos de edificación
fracasados, el 1 de febrero de 1863 firmó el proyecto del edificio actual.
En un primer
momento fue residencia de su promotor, Fernando Carreras, para al cabo de unos
años convertirse en una sucursal del Banco de España. En esa época se le añaden
una serie de buhardillas en el bajo cubierta. Posteriormente se amplía por la
calle Oporto y se destina el edificio a sede del Gobierno militar.
El edificio, de
estilo ecléctico clasicista, presenta una composición simétrica en su fachada
principal. Consta de tres plantas y con aprovechamiento del bajo cubierta.
También dispone de un patio de luces interior.
En sus fachadas destacan
los grandes vanos con arcos semicirculares, todos ellos con balcones y
separados entre sí por pilastras acanaladas. La fachada de la calle Oporto se
diferencia de la de la calle Arenal en que presenta un mayor número de vanos
(nueve), pero la composición y ornamentación son similares.